Mercedes Menor: “Desde el lunes ya se puede solicitar casarse en la explanada del Castillo”

El Ayuntamiento de Villena ha decidido abrir la explanada exterior del Castillo de la Atalaya como espacio público para la realización de bodas civiles. Así se cumplirán los deseos de muchas parejas que tienen la ilusión de unirse en matrimonio en un escenario tan singular y emblemático de nuestra ciudad.
La autorización fue aprobada este lunes en Junta de Gobierno a raíz de una instrucción de la Dirección General del Registro y del Notariado que el mes pasado abría la posibilidad a que el alcalde o los concejales de la Corporación celebren matrimonios civiles fuera del Ayuntamiento.

Antes el equipo de gobierno había recabado informes de las técnicas del Museo Arqueológico José María Soler “que coinciden en que no hay inconvenientes a que haya bodas en este espacio siempre que se tengan en cuenta condicionantes de cuidado y limpieza del Castillo”, apuntaba Mercedes Menor, concejala de Turismo. También se pidió opinión a la Oficina del Casco Histórico y al Gabinete de Desarrollo Económico, que se muestran a favor de recuperar este monumento con acciones que fomenten el desarrollo asociativo o cultural.

“Daremos así respuesta a muchas solicitudes que desde hace años llegaban al Ayuntamiento pidiendo casarse en el Castillo, porque es un lugar representativo para Villena y por las vistas que tiene”, manifestaba la edil. No en vano, a lo largo del tiempo han sido numerosas las solicitudes verbales efectuadas y concretamente en lo que va de año ya se han recibido dos peticiones por escrito.

De modo que los interesados ya pueden solicitar que su boda civil sea oficiada en ese entorno, algo que deberán hacer en el Ayuntamiento, como cualquier persona que desee casarse en la propia Casa Consistorial y que antes solo podía elegir entre el Patio del edificio o el Salón de Plenos.

Eso sí, el Ayuntamiento no correrá con ningún gasto, sino que serán los novios los encargados de aportar el mobiliario, megafonía, decoración, etc. que quieran tener para la celebración “pues en las solicitudes enviadas siempre se comprometían a esto”. Asimismo tendrán que hacerse cargo de la limpieza del lugar tras la boda. “Si en un futuro se ve que estos eventos suponen algún coste para el municipio, se valorará imponer alguna tasa”, señalaba Menor.

Lo que sí se está valorando es limitar el uso de la explanada del Castillo para bodas a los meses del año en que las condiciones climatológicas son más favorables y de momento las dos peticiones por escrito son para el verano. Allí se desarrollarán también las tres bodas medievales que hay previstas dentro de las Fiestas del Medievo la próxima semana.